Su séptimo álbum verá la luz en su sello Prostir
Kateryna Zavoloka es una de las figuras de la escena experimental ucraniana. Nacida en Kiev pero residente en Berlín, es toda una artista multidisciplinar que se ha forjado a base de directos audiovisuales, performances y el diseño gráfico en diferentes portadas. A eso hay que sumar su faceta como productora con un bagaje de seis discos de música experimental y dirigir los sellos Kvitnu y Prostir junto a Dmytro Fedorenko, con quien además forma parte de la dupla Cluster Lizard. Con todo este currículum publicará la próxima semana su séptimo trabajo de larga duración titulado Ornament.
Este LP se lanza a través del sello propio de Zavoloka, Prostir, y contiene siete cortes que ahondan en su reflexión sobre el símbolo de un adorno sonoro, un portador de mensajes que dicta un conjunto de energías armoniosas que bailan a través del tiempo y el espacio. Los patrones de repetición rítmica y matices geométricos bordan el símbolo del adorno, realzando la expresión del espíritu del sentimiento. Altas frecuencias y bajas pulsaciones como un juego de equilibrios para contrastar diferentes tipos de intensidades. Estamos ante una electrónica sobrecogedora, a veces con cierta sensación pretenciosa de buscar trascendencia, pero es algo asumible cuando el leitmotiv es el adorno y sobrecargar de matices las poderosas melodías que buscan explorar lo inconmensurable.
Un vinilo rojo pasión con un material que, según su nota de prensa, nos lleva "a un nivel más profundo de conciencia en una exhibición enigmática y omnipresente de arte abstracto y música, que representa su deseo de borrar los confinamientos que mantiene la creatividad tradicional". Podemos escuchar el tema que abre este disco.
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