El dominio de Kornél Kovács

Así fue el paso del sueco por Mondo Disko

Antes de meternos en materia con la programación de este mes de Mondo Disko, vamos a escribir unas palabras sobre su última fecha de marzo, concretamente el jueves 30. Un evento en el calendario de un servidor estaba marcada en rojo puesto que no todos los días puedes ver al artista que, en mi opinión, fue uno de los grandes protagonistas del 2016 siendo el año de su eclosión sin duda alguna. Hablo del sueco Kornél Kovács, la punta más joven del tridente discográfico Studio Barnhus, que regresaba nueve meses después a la cabina de la sesión capitalina; esta vez sin la escolta de sus compañeros de sello en la que fue una de las noches más divertidas del pasado curso que uno recuerda en semejante escenario.


Quizá el nombre de Kornél Kovács no sea tan conocido en Madrid como el resto de grandes artistas que pasaron por la sala en marzo o quizá que fuera final de mes no ayudaba, el caso es que fue una de esas noches en Mondo Disko en las que el nivel de asistencia es familiar y heterogénea. Eso se traduce en un pie de pista que presenta buen color y cero agobios. De las que gustan a los más veteranos del lugar.

A unas horas bastante tempranas ya estábamos bajando las escaleras de Alcalá 20 con el alma máter de Mondo, Gerardo Niva, ejerciendo de residente. Un set basado en un House de olor clásico donde cayeron cositas de Mr. G y Todd Terry en combinación con nuevas promesas como Shanty Celeste con tramos rítmicos que incitaban al baile disfrutón de primeros compases de la noche. Cuando el goteo de asistencia cubría algo más de media pista fue el momento en el que el discurso se expandió, incluyendo terrenos ácidos como cuando sonó el 'I Lost My Shoes On Acid', la versión acid de Red 7 al clásico 'Don't go lose it baby' de Hugh Masekela. Una perfecta bisagra para preparar al personal en base a lo que venía a continuación. Warm-up inteligente que cumplió su función de no dejar de hacer bailar al público y dejarle la pista a punto de caramelo al invitado sin traicionar el estilo de este.

Antes de meternos en materia con Kovács, hay que recordar que el sueco además de clavar uno de los temas del verano (de nuevo con un edit); viene con un álbum debut debajo del brazo siendo una de las obras más destacadas del año pasado. Y no solo se considera así en esta casa, sino que además ha sido considerado el mejor álbum electrónico del año en los premios musicales suecos. Eso no es moco de pavo. Con este bagaje, el regreso de KoKo a la capital tenía otro cariz si lo comparamos a la fiesta loca que vivimos en junio.

En esta ocasión nada de vinilos, tan solo armado con archivos digitales en sus pen-drives. Actitud seria a su llegada para transformarse en un huracán cuando sube a cabina. Sin parar de moverse, de ecualizar, subir y bajar faders, utilizar efectos y, en definitiva, aprovechar al máximo las posibilidades de la mesa con mezclas largas y dinámicas. Para muestra cuando unió de forma magistral 'Take U' de Soundstore con un vocal latino que literalmente te animaba a bailar."Así me gusta, así me gusta ¡BAILA!", rezaba su letra y era el ejemplo clásico que en manos de otro hubiera quedado zafio y facilón, pero la habilidad y la actitud REAL del sueco en cabina no es forzada ni postureo barato carne de flash. El tipo lo vive, lo disfruta y lo hace a su manera.


Entre su repertorio cargado de House con cierto toque discoide - a veces más guerrero- también se acordó de su compañero Axel Boman y volvió a recurrir a su hipnótica remezcla al 'Casa' de Dinky. Del mismo modo pinchó el siempre adecuado para estas ocasiones 'Nitelife' de Kim English en la versión de Armand Van Helden, un nombre que a la postre también sería recurrente para el cierre. Kovács se amoldaba y si veía que tenía que bajar al barro de algo más cañero, se zambullía sin problema alguno con cosas como el 'Prom Night' de Robert Dietz.

Pero amigos, las sorpresas aún las tenía escondidas debajo de la manga. Posiblemente el tema más conocido del sueco es 'Pantalón', su edit de la canción ochentera 'Sueños de Papel' de Iván. La anterior vez no la pinchó y aquí llegó la novedad porque no es que pinchara el tema conocido por todos que publicó Numbers en 2015, es que puso otro edit que contenía la letra entera. Disfrute y gozo.

A partir de ahí destapó el tarro de las esencias. La gran habilidad de los chicos de Studio Barnhus es saber tener un punto retro y combinarlo con lo actual. Donde lo mismo sonaba 'Bizares Love Triangle' de New Order que un trayazo cósmico de Luke Vibert que dejó para la recta final junto a su reciente remezcla de 'Exostack' a Space Dimension Controller. 

Con las luces encendidas y con una cuarentena de personas que aguantamos hasta el final, puso fin a una sesión de la que le salieron llagas en los pulgares (consulten su Instagram) que cerró con 'I Want Your Soul' de Armand Van Helden demostrando su dominio absoluto a la hora de manejar una pista de baile.  Lo único que pudo hacer el que suscribe fue acercarse a cabina para estrechar la mano y felicitar al artista por el trabajo hecho.

Comentarios