Lewski inaugura el sello de Or:la

Mariachi Guadalajara se edita en Céad


La norirlandesa Orlagh Dooley conocida como Or:la fue todo un descubrimiento de la mano de Hotflush hace tres años, aunque ya se había hecho un hueco en la escena británica más underground en ciudades como Liverpool. Desde entonces su figura no ha dejado de crecer internacionalmente gracias a unos sets muy dinámicos en los que se atreve con casi todo desde breaks, hasta electro pasando por house y techno de toques tranceros. Algo que pudimos comprobar en la pasada edición de Paraíso Festival. Ahora da un paso más en su carrera con la reación de su propio sello discográfico llamado Céad publicando una primera referencia en la que cede todo el protagonismo al dj y productor holandés Lewski firmando Mariachi Guadalajara EP que se ha puesto a la venta la semana pasada.

El artista tulipán que responde al nombre de Jean-Christophe Verweij, ya ha publicado previamente en etiquetas como Patron Records y Wolfskuil, además de pinchar en club y festivales tan emblemáticos de la capital holandesa como De School, ZeeZout y Awakenings. Por lo tanto estamos ante un nuevo e incipiente talento de la siempre recurrente cantera naranja y con Mariachi Guadalajara se destapa como un productor de culo inquieto donde entremezcla estilos como el house, techno y el electro que finalmente es el patrón que guía el EP.

Un trabajo en el que entrega cuatro cortes originales que oscilan entre los cuatro minutos de media cada uno. Todos con una percusión electrizante y con unas secuencias sintéticas muy marcianas marcando ese pulso vigoroso y futurista que embriaga todo el EP.

'Guadala' es el track que abre este mundo electro dejando claro lo agusto que se mueve en patrones en los que los ritmos rotos son el canon con los que muta y experimenta líneas de bajo bien gordas y sonoridades punzantes y bien engrasadas. Algo más dub, relajante y minimalista es 'Jara' siendo la otra cara de la moneda.




La cara B contiene el track más puramente electro y acelerado como es 'Mariachi', todo un puñal para el cerebro mientras que el cierre queda para 'Desacorde' en el que vemos como el holandés se desenvuelve con un sonido más crudo en el que su juego de percusión es el protagonista principal junto a un uso muy tenso del sintetizador.




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